02.- Librerías: Linux cuenta con librerías publicadas en Internet, con las cuales podemos modificar cualquier aspecto del sistema operativo para mejora personal.
03.- Adiós errores: No verás más el mensaje “Se recomienda cerrar todas las aplicaciones antes de continuar” ya que en Linux no es necesario.
04.- Rapidez y Recursos: Si comparamos con Windows, Linux es ampliamente más rápido, necesitando menos recursos en cuanto a hardware.
05.- Rendimiento: Adiós a herramientas para aumentar el rendimiento de nuestro sistema operativo, o de herramientas para desfragmentar nuestro disco duro.
06.- Instalación: La instalación del sistema operativo dura la mitad, tan solo debemos reiniciar una vez, contra las cuatro o cinco veces del Windows.
07.- Reinicio tras instalación: No tendrás que reiniciar tu ordenador cada vez que instales un programa, dispositivo o actualización.
08.- Antivirus: No es normal instalar algún tipo de antivirus o antispyware, y en caso de instalarlo no es necesario actualizarlo.
09.- Claves y cracks: No necesitarás buscar y descargar claves o parches de páginas de dudosas procedencias, lo que lleva a la infección de nuestro ordenador.
10.- Drivers: Al enchufar un dispositivo, por ejemplo una impresora, memoria flash, disco externo, etc. empezará a funcionar automáticamente sin necesidad de instalar su respectivo driver.
11.- Todo gratis: Todas las aplicaciones serán totalmente gratuitas, no necesitarás piratear ninguna aplicación para su uso.
12.- Paquete de aplicaciones: Linux por defecto trae gran cantidad de aplicaciones con las cuales podemos hacer cualquier tipo de tarea.
13.- Descarga de aplicaciones: Si en las utilidades que trae Linux por defecto no encontramos una herramienta adecuada, podremos descargarla de Internet totalmente gratis.
14.- Clasificación: Las aplicaciones en el menú inicio se encuentran clasificadas en forma lógica, no como en Windows que se encuentran todas las aplicaciones.