Mikogo es una herramienta para compartir nuestro escritorio y controlar una compu remota en forma segura,
pero que hasta ahora solo se encontraba disponible para Windows y Mac
OS X. Pero con la llegada de su versión 4, ahora también está disponible
para Linux y así se convierte en una alternativa multiplataforma con la cual todos los usuarios podemos contar.
Uno de los aspectos más interesantes de Mikogo es el de poder añadir múltiples participantes a una sesión, incluso una vez iniciada esta, y podemos cambiar al usuario en control de la misma cuantas veces queramos. Además, las conexiones son seguras (a través de encriptación AES de 256 bits) y están basadas en un número de usuario por lo cual no es necesario que recordemos las direcciones IP de todos los participantes.
Esta primera versión de Mikogo para Linux está muy bien pero hay algunos problemas que seguramente se irán solucionando con el paso del tiempo, como el hecho de que no funcionan los atajos de teclado. Además, está claro que irán llegando algunas características que por ahora solo están disponibles en Windows, como la pizarra o la opción de ajustar la calidad de vídeo, pero sin dudas es un gran primer paso para poner a Mikogo a la altura de TeamViewer y convertirse en una opción más que válida.
Uno de los aspectos más interesantes de Mikogo es el de poder añadir múltiples participantes a una sesión, incluso una vez iniciada esta, y podemos cambiar al usuario en control de la misma cuantas veces queramos. Además, las conexiones son seguras (a través de encriptación AES de 256 bits) y están basadas en un número de usuario por lo cual no es necesario que recordemos las direcciones IP de todos los participantes.
Esta primera versión de Mikogo para Linux está muy bien pero hay algunos problemas que seguramente se irán solucionando con el paso del tiempo, como el hecho de que no funcionan los atajos de teclado. Además, está claro que irán llegando algunas características que por ahora solo están disponibles en Windows, como la pizarra o la opción de ajustar la calidad de vídeo, pero sin dudas es un gran primer paso para poner a Mikogo a la altura de TeamViewer y convertirse en una opción más que válida.